martes, 7 de octubre de 2008
Ya vuelvo
domingo, 14 de septiembre de 2008
Diarios
....
Pero nunca nada jamás es suficiente y quiero anteceder mi cuerpo al valor. Y la valentía que se distraiga del miedo.
....
Despierto, no estás y no da igual. Tu ausencia son las razones de lo que se quiebra, de la proyección … siempre al vacío. Trago más de lo que mi cuerpo aguanta y entonces me ahogo. Es la respuesta que daría a tus razones, si es que existen.
....
Me aferro a tu imposible que es mi ya tan posible conocido.
sábado, 6 de septiembre de 2008
A ver ese deseo que prepara el flash, si se llama delirio
sábado, 30 de agosto de 2008
El vestido amarillo, la playa y lo deseable
Destino
Lo que se escapa, lo que se vuelve añicos, lo que cae fuera de ese amasijo de pensamientos que son los recuerdos: no hay porque preocuparse, no entrarán en las memorias. Si uno sólo transitaría, evitando el recuento, siendo sin importar la suma que resta. De que nos preocupamos si nadie nos adorará posmorten, ni guardarán nuestros sucios papeles en vitrinas. Si no esperamos el reconocimiento rechoncho de la historia, ni la fama efímera del arte. Si podemos dormir tranquilos que nada se convertirá en irremediable.
jueves, 21 de agosto de 2008
noche
miércoles, 20 de agosto de 2008
Receptores
viernes, 15 de agosto de 2008
Desmayos
viernes, 8 de agosto de 2008
Duo
lunes, 4 de agosto de 2008
Creo
En aquello que transversalmente nos atraviesa y nos convierte;
nos muta en lo que somos,
en lo que seremos cuando fuimos,
cuando estamos siendo,
cuando sagazmente dejamos de pasar, de creer.
Creo en lo inválido de lo que está.
Creo en el jamás.
No quiero certezas,
me gusta descreer con la impaciencia de la transformación.
Creo en la infinitud del paisaje impalpable.
En lo inabarcable del transcurrir.
En las posibilidades estallando a mis espaldas, rasguñándome la piel.
Creo en acechar al destino como una excusa
y perpetuar en la satisfacción de lo inalcanzable,
aturdiendo al porvenir cuando damos vuelta la esquina.
Creo en desconfiar de tus ojos si me miran sólo pasando
y creo cuando me miran ilimitadamente estática,
inmensamente detenida.
martes, 29 de julio de 2008
El amor, sus relaciones
pensá en general que guste mucho significa que sea inalcanzable
W. dice:
vos decís por el mecanismo de la imposibilidad?
el pony extremo dice:
y sí, si es posible el otro es con su humanidad, sus vueltas, sus paranoias, su entrega disfuncional, su histeriqueo mal actuado, etc
W. dice:
jajajaja
W. dice:
que grande
el pony extremo dice:
que cuando hay encuentro, es decir los dos dicen bueno a ver que pasa acá, cada uno se muestra no tipo femme/machi fatale sino más bien un tanteador. Después esos detalles se superan y empieza la pavada del amor: bichito de luz, copito de nieve, que hubiese sido de mi sin conocerte, flan acaramelado, cilelito de la noche estrellada en Katmandú, bebé que da ternura, hermosito de mi vidita, sin vos muero, pienso tanto en vos corazoncito de papel maché, etc.
lunes, 28 de julio de 2008
Reconto
viernes, 25 de julio de 2008
Los Balcanes
- Obvio que lo vamos a poner de moda, no te olvides que a Bregovic lo puse de moda yo!
- Es verdad! Estuviste a la vanguardia. Vos lo escuchabas y lo bailabas cuando las Bubamara todavía no existían. Sos un groso.
2- Día siguiente. Mensaje de texto: Pony te extraño! Vení a ver esta banda hoy a la noche que está buenísima. Contestó: Dale! Ahí estaré
La banda se llama Babel, tocan música balcánica y es muy divertida. La gente baila en trencitos y rondas, ellos hacen performance y dan ganas de más cuando termina.
3- Parece que estoy en la semana balcánica o algo así.
miércoles, 23 de julio de 2008
Suelta
jueves, 17 de julio de 2008
El recibimiento de la noticia
martes, 15 de julio de 2008
Deseo
BLANCHE: [...] A los dieciséis años, descubrí... el amor: de golpe y
en forma muy completa, demasiado completa. Fue como si a una le
mostraran bajo una luz cegadora algo que siempre había estado en la
penumbra; así descubrí el mundo. Pero fui desdichada. Me
desilusioné.
jueves, 10 de julio de 2008
Volver a empezar
miércoles, 2 de julio de 2008
Tracy Chapman y mi primo
Creo que cuando mi primo me regaló los casetes fue una de las primeras veces que me sentí grande. Y fue una muy linda sensación. Mi primo muy lindo, muy canchero para mí, me trataba con respeto y me elegía como la especial de la familia: me contaba sus historias amorosas, me pedía que lo acompañe a fumar o me convidaba de la cerveza que siempre tiene en la mano. Los años pasaron pero lo que se construyó por ese empujoncito, casi simbólico, a crecer se tradujo en otros empujones y ayudas ya más del orden de la adultez. Pero siempre flayeados por habernos elegido primos y no haber devenido así, como pasa la mayoría de las veces en las familias. Nosotros nos elegimos hasta el amor y ahora charlamos profundo cuando no sabemos bien para que lado ir. Yo lo sumo orgullosa a mi lista de incondicionales, alegre de la indiferencia que me provoca los caminos tan distintos elegidos y un poco siempre agradecida por el impulso del empujón.
domingo, 29 de junio de 2008
Entre
miércoles, 25 de junio de 2008
Feliz
martes, 24 de junio de 2008
Dos razones
Si la estrechez me carcome rompo en un alarido y después es imposible volver a atrás. Lo irreversible hace que ruede si igual voy a chocar. Cuando me someto al azar duele como goza. Pienso: sin ese dolor no estaría esta redención y esa es una buena razón.
viernes, 20 de junio de 2008
Deshiladas cumpleañeras
martes, 17 de junio de 2008
sábado, 14 de junio de 2008
Dorothy y Kifky
lunes, 9 de junio de 2008
Quién vino
viernes, 6 de junio de 2008
Bailar
miércoles, 4 de junio de 2008
Deshiladas
lunes, 2 de junio de 2008
miércoles, 28 de mayo de 2008
Oficios
Así que fui descartando uno a uno los que no me gustaban mucho, los que no me dejaban ser como quería, los que pregonaban demasiada libertad, los cortos y los muy largos. De algunos recorrí algo y me fui, de otros lugares los descarté antes de pasar. Ahora ni me pregunto que hubiese sido de recorrerlos, sólo me pregunto cuáles fueron los que decidí transitar.
Ya sé que no todo termina acá pero, no me acusen, hay cosas que han seguido su curso y está bien que así sea. Lo que no fui, ahora practico serlo:
peluquera, escritora, maestra, psicóloga, historiadora, diseñadora de modas, instructora de yoga, modista, artista plástica, titiritera, inventora de juegos de mesa, urbanista, actriz, critica literaria, vestuarista, filosofa fenomenológica, chef, cuidadora de gatos, mochilera, poeta, guía turística, empleada insuficiente, militante, investigadora, asistente social, política, fotógrafa, terapeuta de pareja, informática, periodista, embajadora en París, estudiante eterna, jugadora de bridge, animadora de fiestas infantiles, organizadora de eventos, peronista, especialista en literatura maldita, decoradora de interiores, directora de teatro, artista en papel mache, productora de radio, editora, humorista stand up, mateadora larga, naturalista, etnógrafa, turista …
lunes, 26 de mayo de 2008
Pincelada
Había otras palabras, como siempre las palabras, que venían a decir nada sobre lo que estaba pasando, que venían a distraer lo insoportable. Y las sonrisas o las piruetas, la luz, la tos, algo, por favor, que separe los cuerpos, que retraiga los impulsos, que libere las mentes (como quien dice, yo no quiero). La mente brilla si es la distracción del cuerpo. No quise caer en la delicia de la memoria para apartarme.
Pesaron silencios, porque no dejan salida, pero son bien interrumpidos por otros artilugios, menos convencidos, que aconsejan equivocarse para retraerse.
Y yo, que soy suelto, pensé que otra vez estaba sólo para lo que haga bien. Después me distraje y me raspé con la memoria.
El goce se me equilibra entre mis placeres y mis dolores.
Desde lo bajo un empuje ciego, persistente, liviano e impuesto. El tirador suelto, amor, guía favorecido por la falta de cordeles. Delicia, sí, gloria y perdición.
Arranqué con la misma miseria.
- No aciertes esta vez. Sé que todavía estoy ciego para ver en tu hedor mi placer. No apuntes, no pienses.
Después, como no soy muy meticuloso con la sinceridad, me abroché al delirio. Todavía el vacío no me pertenece, todavía piso en las mismas espinas débiles que se doblan antes de hacerme sangrar. No quiero saber del vacío que no me pertenece, ¿enterarme de todas las carencias que acercan la curvatura para después no reflejarme?
Debería haber aprendido a acribillar los relatos. Debería saber no mirar, no tocar o matar. Es mi amor, otra vez, mi ceguera.
- No yerres, amor, a la delicadeza del goce. No vuelvas a perder un poco de brillo por el encanto, no encantes e iluminá.
Amor me pierde y desamor me encuentra (no en el eje porque me ubica en el suelo).
- ¿Sabré acorralarte antes de que me deshagas otra vez, sobrevivirte?
Me susurra algo. Me sugiere. No puedo no escuchar y me estremece.
- No hables. No apuntes, dije, no fijes, no pienses, no relates. No abordes. Piedad, amor, que todavía son víctimas del suceso, que todavía no viven, que todavía vuelan.
¿Amor inmaculado después de tanto derroche? Algo tiene que haberse volcado, y no se quiere ensuciar. Pero mi memoria, maldita memoria, me trae cada tanto esos rasguños del único rumbo que existe que es el que ya transité. Y amor saluda sin cuerpo mientras se desvanece por horror.
(Es un escrito de Bat que me regalo para que lo suba acá, me gusto mucho)
domingo, 25 de mayo de 2008
Chantaje
Atascado en la nuca,
apaciguado reflejo,
acepto la conveniencia, sin más, porque es impuesta;
desciende por la columna,
lo dejo entrever mis venas,
no se trata de callarte o gritarte,
de nombrarte u olvidarte;
transito lento por el espacio cerrado del tramado
silencio, voy lento:
es una emboscada atacaré en tu espalda;
cuando calles, yo grito,
cuando escupás, yo trago;
encañonaré la piel,
chantajearé los hechos,
me inmiscuiré.
Será demasiada la sombra:
destruido tu pasado y mi presente.
viernes, 23 de mayo de 2008
Dos diálogos
Lo que escribí antes, las instrucciones ,fue una idea de A.
Me estaba contando que tuvo un sueño con una chica que fue su novia; ella se iba y le mandaba una carta de lejos. Yo le pregunto: ¿que te ponía en la carta?. Me responde: no me acuerdo ¿me mandaría las instrucciones para su ausencia?
2.
- Hay minas "ricas" y minas lindas.
- No entiendo, ¿como es la diferencia?
- Ponele: Scarlet Johansen es "rica" y Liv Tyler es linda pero no es "rica"
- Ah, ¿y yo qué soy?
- Vos sos "rica" y linda
- ¿O sea que soy más linda que Scarlet Johansen?
- Jaaaaaaa claro que no, pero igual vos sos linda y "rica".
( el amor te hace decir cualquier estupidez)
Instrucciones para mi ausencia
- Bórrame lentamente de las noches de tu semana.
- Silenciá los discos de Radiohead, Spinetta, Cerati.
- Desparramá mis cosas para que al no estar todas juntas saquen mi presencia
- No podría haber sido nada de lo que no fue. Así, fue hermoso.
- Tapá las palabras tontas del amor, eran solo eso: tontera. Ya habrá más destinatarios.
- Extirpá los recuerdos del sexo, de las noches, de las fantasías, de las sensaciones.
- Fantaséame siempre riendo
- No hubo emboscadas, tampoco estrategia
- Creé que siempre hay algo que queda.
- El olvido es una opción.
- "Siempre termino en lo mismo, asesino tu fantasma y la diana me sorprende recostado en el balcón"
lunes, 19 de mayo de 2008
Hoy
Habrá momentos así, mientras tanto me estallo de risa y de sueño por tanto caos vuelto vida. Demasiadas ideas para tan poca cualidad. A veces es mejor dormir.
Habrá momentos.
jueves, 15 de mayo de 2008
Declaraciones
viernes, 9 de mayo de 2008
Caminata
San Telmo está soleado hoy, sólo escucho conversaciones de idiomas lejanos y veo precios para lejanos bolsillos. Pero la sensación de bienestar de caminar al sol puede más que la frustración de no poder consumir nada. Me siento parte de algo y no sé bien de qué, de la ciudad o de lo que pasa en ella, de lo que planeo o de lo que hago. O quizás sea la intensidad de algunos momentos que siguen pasando.
Pienso: cuánto vaivén de sensaciones ¿Cómo puedo, a veces, sentirme tan extrañada, tan perdida, afuera de todo; ser ajena hasta de mi misma? Otras tantas veces siento esta sensación de creerme imprescindible en algún orden , en alguna cadena, ambiente. Sentirme familiar como si cada lugar haya sido mío, lo haya habitado, estudiado, conocido cada detalle.
Mientras el sol pega en mi cara la sensación de ser fundamental, de estar planeando una gran idea, de pertenecer a la mejor elite que a la vez es masa.; de transitar dejando huella. Y quizás en esa misma sensación, de repente, explota lo nimio, el acoso de que cada movimiento lleva tanto esfuerzo voluntarioso; tanta razón tanteada para que cada día uno no quiera renunciar y a la vez sepa que no tiene caso, que son simples excusas, que la mayoría de las veces se disipan por sí mimas.
Y siempre vuelvo a creer que es cuestión de fe, que por eso creo, y menos mal que ahora siento está plenitud, y no me importa que sea tan efímera como las pocas cuadras que me restan caminar hasta que me sumerja en el subte. Y baje hasta el tren despabilada y sonriente.
miércoles, 7 de mayo de 2008
Terrenos resguardados
Dejo que el sol me encandile; me gusta la sensación. Me gusta porque cuando cierro los ojos y aparecen las manchitas negras en la luz, ellas devienen escenarios; su aparición no es una elección. Hay otra zona, otros lugares que habito sin estar. Cada uno, es una parte de mí, de lo que soy o de lo que me gustaría ser. Escenarios que se repiten y sostienen diferentes escenas, extraídos de deseos y recuerdos infantiles, de otros lados y de otros tiempos.
Una casa con patio empedrado con un árbol grande y una hamaca paraguaya; una ciudad parecida a Buenos Aires pero con mar en vez de un río lejano; un puerto amplio y suburbano que a veces me da miedo y otras veces me da amor; un río con sauces llorones en la orilla, me tranquiliza, se parece a los lugares a donde íbamos a pescar mojarritas cuando niños con mis papás y mi hermano; un monoambiente pintado de blanco muy minimalista y cool, en un piso alto de un departamento antiguo y señorial; la casa en la playa con desniveles y un amplio porche, un ventanal enorme al mar y mi biblioteca rebalsando de lecturas, hay perros y gatos y es el descanso activo más lindo que puedo fantasear; hay pedazos de Uruguay acá y allá, de la ciudad y de la playa, que se meten solapados;
Espacios que son refugio, condensaciones, puzzles del tiempo, de mi misma: espacios acallados, móviles, donde escapar cuando se vuelve asfixiante, se repite tedioso, hostil.
domingo, 4 de mayo de 2008
Rito
El amor es lucha: te domino para que me domines y si sucumbo a tu abismo es el mío. El llanto desconsolado es la partida desde y hacia un rito amoroso. El paisaje deja de ser la cama y la ventana; se transforma en lo imprevisto, hay movimiento constante. La quietud es parte, está dentro, componiendo y descomponiendo.
Extenderse, defenderse, a veces es emboscada y otras tantas es el tiempo dejándose.
viernes, 2 de mayo de 2008
Resplandores
y en la cabeza de cielo del pelado,
en el lomo de la gatita
y en los rulitos de mi ex.
Purpurina en los parpados del amor,
en el escote
y en las botas.
Purpurina en la barba del amor,
en los ombligos,
en las tostadas del desayuno,
en la cama,
sobre mis manos,
entre los dedos.
Purpurina todo brilla,
somos esplendorosos, así, esparciendo glamour.
(vamos dejando una estela de brillo artificial)
jueves, 1 de mayo de 2008
Vuelve
La escena vuelve, me explota en la cara. Es hipócrita. No hay temor porque lo que sucedió ya no pasa pero no hay resignación: la pérdida nunca fue una posibilidad. Entonces pensé mientras caminaba, cuando dejaba que mi mente atraviese a ese otro terreno, las posibles diálogos del ahora. Relatos sobre nuestras ausencias, detalles rebalsando de tanta incondicional declarada. Porque la entrega nunca es temporal entonces vos y yo seguiremos siendo un poco también en el ahora. Y en esa satisfacción de que no todo se diluye en la inmediatez, de que tanta desnudez rompe ataduras, me explaye sobre vos con lo que había en mis manos: migajas de ese amor y mucha entrega.
De este lado, todo era moldeado, los mismos ojos llenos de cansancio esperando una redención mucho más allá; el mismo sacrificio embanderado y unas ganas infinitas de llorar. Te hubiese abrazado para decirte que te dejes en paz, que te entregues, que la belleza esta ahí y te alcanza. Te hubiese entregado una a una todas mis carcajadas para que detones tanta amargura.
Los abismos siempre son más, nunca jamás alcanza tan poca realidad a tanto deseo de la constancia. Apabullada de tanta desilusión fui decreciendo en casi cada imagen construida hasta formar este desierto, arrullada de soledad.
Corriente
Empuja para que se mueva y casi siempre queda estático. Es casi desesperado el impulso. De vez en cuando toma coraje: observa, reflexiona, calcula, sopesa. Mira por donde y decide. Entonces se generan expectativas y lo diferente irá a tomarlo todo, será otra etapa, nuevo ciclo. Al principio no hubo más reflexión, después empezó la melancolía porque se agigantan los recuerdos. Entonces la duda y después la desilusión. Lo peor está en no creer, el hermetismo devino de tanta prisión. Luego sólo espacios saturados de tanto uno, asqueado. El padecimiento pareciese ser la quietud del movimiento.
sábado, 26 de abril de 2008
Fragmento: Ojos (II)
El silencio lo llenaba todo, era todo. Silencio inundando el cuarto, llenando el vacío.
Casi nunca llegaban las palabras antes de la despedida. Los cuerpos murmuraban, dialogaban.
Generalmente te esfumabas antes de despertar, te ibas a aquel otro lado, sin avisarme, sin pedir que te acompañe. Entonces, se desataban batallas en mi interior que me carcomían, me transformaban el sueño.
Otras veces, sólo volábamos, escuchando la completitud. Atónitos por ser, por estar. Esos momentos quedaban adheridos en mi mente y se sucedían las imágenes en los siguientes días, raptándome por horas al recuerdo. Secuestrada en mi memoria pasaba cuentas al recuerdo y te atribuía palabras que no dijiste, pensamientos que no tuviste. Te hacia renacer eterno, incondicional. Mentía a mi recuerdo y enloquecía en la soledad de mi silencio especulando con el tiempo que gastabas imaginándome otra vez desnuda.
A veces batallábamos por horas: ostentaciones de poder que se basaban en nuestra propia necesidad del otro. Guerreábamos hasta quedar exhaustos, contando las víctimas masacradas en la batalla. Rogándonos una tregua, la desaparición del tiempo. Y otra vez, mi soledad muerta de miedo. Queriéndome escapar de lo que provocás en mi mente, del estremecimiento de mi cuerpo.
Nuestras soledades se aplacaban de madrugada, entredormidos, tocándonos, los pensamientos se acallaban. Y regodeaba la paz en la habitación. Me mirabas declarándome necesidad de mí: sólo yo podía perpetuarme en tu piel, yo elegida, única, yo tu reflejo, tus posibilidades irracionales. Yo trayéndote a tierra, llevándote al cielo.
Pero mientras tu mirada prometía, vos huías agazapado, corrías pregonando libertad; vos tocabas otras mentes, otros cuerpos. Cansada tu mirada de mentir volvía (siempre volvía) a hacerme nacer desde tus ojos. Y era el silencio nuestro testigo, y eran nuestros cuerpos los que regresaban para acariciarse.
Parecía incierto o demasiado pretensioso retenerte dentro mío. Entonces pasaba las mañanas tendiéndote trampas para que vuelvas, para que no te vayas.
martes, 22 de abril de 2008
Sí y No
Tres sonrisas, más una carcajada generan un poco de felicidad. Vos y yo dormidos pero abrazados genera contención. Un abrazo de esos que se te desploma el cuerpo sobre el otro, da mucha paz. Una mirada llena de ganas de besar, dan más ganas de besar. Un ataque de risa entre dos o más, da mucha alegría. Así sí puedo estar.
domingo, 20 de abril de 2008
viernes, 18 de abril de 2008
Los Rusos
Y tendríamos en la parte de atrás de nuestra casa de campo un baño turco lleno de vapor, donde hombres rusos llenos de músculos, grandotes y colorados nos azotan con maíz, para relajarnos más. Para jugar con el placer que está entre el dolor y el goce.
Y a la noche habría fiestas multitudinarias del partido, y como somos rusos (yo sería muy blanca, muy colorada y con más pecas) nos emborracharíamos con vodka y nos besaríamos todos con todos. Entonces festejaríamos: serían grandes demostraciones de cariño, montones de caricias, sorpresivos ataques entre mis piernas, cúmulo de cuerpos frotándose. Eso sería si fuese rusa.
Y para relajarnos (si todo esto no bastó) nos meteríamos al Volga todas las mujeres desnudas y nos acariciaríamos mientras morimos de risa, y nadamos, nos salpicamos y nos besamos, todas coloradas y blancas, riéndonos en ruso.
martes, 15 de abril de 2008
Encanto
lo que brote, sea espeso o líquido, bebérmelo
de esa embriaguez no recordar nada
excepto el estallido
de esos añicos rasgar otras suavidades
de sus brotes succionar el veneno
con esa falta de aliento sentir el mareo
de la confusión, desconocerme
del desconocimiento, animarme
de la valentía, la locura
al fin irracional esparcirme sutilmente.
domingo, 13 de abril de 2008
Fragmento: Ojos
Una nota me deseaba un buen día.
Aún persistías en el cuarto.
Era tu olor.
Quise seguir durmiendo, no pude.
Me dolía el cuerpo.
Todavía me hablabas.
Desayuné tostadas y café.
Tenía hambre.
Recordé casi toda la noche sentada mirando la ventana.
Me preocupé de que mis recuerdos tengan forma.
No deseaba olvidar los detalles.
Me recosté de nuevo.
Traté de dormir.
No pude.
Mis pensamientos querían preguntar.
No me animé.
No quería cabos sueltos, ni inferir. Ya no especulaciones, ni asociar ideas y pensamientos.
No quería que tus palabras se vuelvan un enigma para resolver después de tu salida.
No lo pude evitar.
Y otra vez mi mente atada a tu recuerdo.
Mis trampas esperando cazar.
De repente, me invadió una sensación de alegría: habías sido más mío, había sido menos tuya.
Entonces entendí, no habían sido las palabras que dijimos, ni mis preguntas sin decir, las que te habían acercado. Era el silencio, el que te proclamaba mío.
Dudé.
Recordé.
Dudé de decirte, de hablarte, de nombrar lo que jamás podría.
Dudé de tu cuerpo dormido, inerte.
Dudé de mis plegarias a tu imagen.
¿Por qué no me hablabas? ¿Por qué no me nombrabas, no me contabas, no me relatabas? ¿Por qué yo no existía en tu afuera, en tu día?
Sólo me dabas el silencio, solamente me ofrecías tu olor.
Sonó el teléfono.
Corrí a atender.
Me agité.
La conversación no duro más que unos segundos.
Volví a la cama
Soñé.
Me levanté, no estaba dispuesta a seguir secuestrada.
Me peiné.
Salí a la calle queriendo encontrarte.
viernes, 4 de abril de 2008
Derivaciones deshiladas
jueves, 3 de abril de 2008
Gustos
lunes, 31 de marzo de 2008
Más
viernes, 28 de marzo de 2008
Deshechos
Horror del quizás, el arrepentimiento como purga, pero no hay dejo, no hay huella, no pasó.
Nada se inscribe porque todo sigue sucediendo, lo que me seca es soledad tan enfrentada. Ni el menor gesto. Desánimate. No hay ni siquiera un solo espacio en el que dejar al grito devenido espasmo, ni siquiera está la redención de las lágrimas. Tampoco queda la imaginación de la liberación, la liviandad del que vendrá. Espanto más que horror, flotando desvanecida. Pareciese que solo queda agriar las venas.
jueves, 27 de marzo de 2008
Atonismos argentinos
Una vez más no podemos creerlo. Ya son demasiadas la veces que nos dejan atónitas las reacciones pomposas de los que se dicen vecinos.
martes, 25 de marzo de 2008
Condensación
En la mitad me parece que hubo mucho amor, almuerzo de empanadas y casi muerte de ternura por mirarlo durmiendo. Y más o menos en la mitad, creo, hubo una pelea que amenazo con final pero al final no era más que una forma muy intrincada de declararnos lo que de otra manera no nos animamos.
La noche de lluvia, fue con miedo porque estaba sola y afuera estaba todo oscuro y como antídoto al susto dejé las luces prendidas. Ingenuamente, como una nena, dormí tranquila.
También hubo dos veces teatro, y visitar a otros amigos, y que venga mi amiga mamá con su hija y cantemos las tres Manuelita, y almuerzo con papá y mi hermano y pasar a saludar a mamá, cenar a las 4 de la mañana palta con chapatis, lost capitulo 8, charla de lost y capitulo 8 y fiestas fallidas porque todos los lugares están saturados y hay que quedarse en la puerta esperando que salga gente y cuando entrás están tan repletos que te querés ir, charlas en la cocina, dormir mucho y también dormir poco, estudiar, limpiar y no poder creer que de repente todo vuelva a la normalidad y el martes sea un lunes.
sábado, 22 de marzo de 2008
Enumeraciones
Toneladas de mate.
-Un fabulosos mundo interno que la traslada a los mejores sitios y que no tiene ninguna competencia con la solo-de –vez – en- cuando –sorprendente- realidad.
-Una suerte envidiada por muchos y cierto arte secreto para caer donde debía en el momento exacto (y aunque ella se adjudique el poder no siempre este es manejado por ella sino viceversa).
-Demasiado preocupación por los demás, por lo que dicen por lo que hacen, por el mundo.
-Un desencajamiento casi constante entre lo que quiere y lo que puede, que le permite estar siempre en donde debe sin darse cuenta.
-Un chico que adora en forma intermitente y que nunca esta seguro de ella pero que expulsa seguridad hacia fuera.
-Tres gatos a los que ama y que a la vez son su pesadilla nocturna porque saltan sobre su cabeza cuando duerme.
-Una risa estridente y sumamente original que le da el toque freak y poco seductor que ninguna mujer debería tener.
-Un tremendo pánico a morir en un accidente automovilístico, miedo que la llevo durante años a evitar lo máximo posible cualquier viaje en auto, sobretodo de noche.
-Muchos cuadernos llenos de anotaciones y dibujitos infantiles que colecciona como el gran tesoro de su vida soñando que alguien posmorten los publique.
-Una intolerancia afectiva y evidente hacia las personas que se creen demasiado, hacia los hombres pocos simpáticos.
-Una debilidad por su padre.
-Una pasión por las listas y la enumeración, hay listas en la mesa de luz, en la cocina, en los libros, en el baño, en los poemas, en las miradas, enlista cuando camina, cuando duerme, cuando habla. Las listas son su obsesión.
-Un encantamiento por Buenos Aires la cual conoce minuciosamente porque ha pasado muchísimo tiempo caminando por sus calles. Retiene todos sus nombres y conoce muy bien las líneas de colectivos.
-Amigos: un montón de amigos varones con los que se ríe sin cesar. Una amplitud para coleccionar amigos (sólo hombres) de muy distintas especies, sin creer que esta heterogeneidad se contradiga con ella o entre ellos.
-La planificación de su vida intenta ser obsesiva pero una y otra vez se disuelve en un caos que nunca termina de perderse ni de definirse. Demasiados interrogantes cubren su mente y la falta de un proyecto que le dé algún pie en tierra la llena de inestabilidad constantemente. A esto se le agrega un apasionamiento momentáneo por cualquier cosa que emprende. Apenas empezada, su obnulación con la nueva actividad es total hasta ir perdiendo poco a poco el entusiasmo inicial.
miércoles, 19 de marzo de 2008
Tabaco
martes, 18 de marzo de 2008
Fronteras
De la comida a la cama con un piloncito de películas, gana (porque siempre gana Almodóvar) Hable con ella. Yo ya la vi dos veces, pero sólo me acuerdo de la historia. La vi sola en el cine Lorca, y no me había gustado mucho. Después la volví a ver no sé cuando y me gusto bastante. Esta tercera vez directamente me encantó, la ambigüedad, lo indefinido, la película transcurre un estado que no es ni de vida ni de muerte, que no es masculino ni femenino (vale para el personaje de Benigno y de Lidia). “De lo masculino emerge lo femenino, de la muerte emerge la vida y de lo terrenal emerge lo etéreo”.
La mañana es sueño pesado, y muchos sueños. No quiero despertarme. Creo que quedo una hora entredormida, soñando conciente, atravesando también un estado que no existe, pura transición, ni despierta ni dormida. Un estado que es uno solo y que abarca varios. Me quedaría así, en el tránsito, un rato tan largo.
lunes, 17 de marzo de 2008
Y danzar y danzar
De acá a allá
Cambiar el trabajo ¡Sí! Claro. Sería maravilloso, un trabajo más interesante, mejor pago. Pero no tengo otro trabajo al que cambiar y mientras busco tengo que seguir viniendo a este, aunque lo odie profundamente.
Bueno, una decisión tajante, cambiar de ciudad. Una nueva vida, lugares desconocidos, descubrir otros espacios, conocer otra gente. Descartado no aguantaría ni dos minutos lejos de mis amigos, me encanta Bs As pese a todo.
Empecemos por cosas pequeñas, cambiar el peinado. Bien. Fui a la peluquería, explique que no quiero perder el largo porque me cuesta mucho que me crezca el pelo pero que quiero una nueva forma, algo con más onda. Nadie se dio cuenta que había “cambiado”, el pelo esta casi igual.
Entonces claro me siento estática y cuando duermo sueño que todo es diferente que en la ciudad hay playa y mar. Hay barcitos sobre la orilla donde bailar y divertirse. Hay nuevos amigos y viejos renovados. Hay expectativas de algo que entre todos estamos organizando y va a cambiarnos. Hay producción de arte: dibujos, películas, libros. Y hay mucha alegría. Tanta, que me despierto exaltada por demasiado movimiento.
martes, 11 de marzo de 2008
Testamento
Me debo
el boceto de mis palabras en la declaración de fidelidad al transito por la tierra virgen de tu piel
Me debo
el comentario sagaz en mi mejor hora
el esbozo de sonrisa entre las mareas empleadas de la luna
la llegada al horizonte
alguna respuesta
el portazo al delirio
la insensatez de abarcarlo todo mientras me caen las migajas entre los dedos
Me debo
que la cerradura, por donde espío mi vida, se abra, se agigante y se convierta en ventana
que me aturda la corriente de mi sangre
que me inunde la saliva de mi boca
que encandile el destello de mis pupilas
que me extinga el silencio por tanto rugir
Me debo
la identidad de estúpida libertaria
la actuación con aplausos de pie
la tragedia vivida en alta mar
la música de mis pies andando al costado de la ruta
Me debo
pisotearle la corona al rey
saborear la carne cruda
sentarme a beber mi sudor
escribir sin pausa
con fiebre
dejar que me dicten las palabras desde el subsuelo
Me debo
la resignación de estar aprisionada dentro de mi piel
de poder contar las dimensiones
de querer aparentar la idealidad
Me debo
la esperanza de que deje de girar aunque sea un instante
asquearme de pureza
escurrir mi inteligencia
asesinar a mi conciencia en una noche sin luna para que no queden sus rastros pegajosos esparcidos por ahí
Me debo
el torbellino de lágrimas que me hidraten los huesos
Para que finalmente pueda descansar sobre la lápida de lo que fui.
Dislocar
Un suceso de hechos sin importancias, un recorrido de días sin particularidades pero todo fue volviéndose extraño, un velo de desconfianza cubrió lo rutinario. Una desconfianza basada en mi misma, en lo que hago, en lo que se me repite. Una insatisfacción tremenda, no pegada a la complacencia.
No fue un estallido, más bien diría que fue un dislocamiento.
Lo único claro, era que ya sabía todo. La necesidad se imponía en repliegue. Casi era imposible soportar a los demás. Mucha voluntad rodeaba mi estar con otros. Una intolerancia absoluta hacia las formas que cada uno tiene de procesar lo “real” se me hizo evidente.
Así lo deje pasar, sumida en ese hartazgo tan conocido, siempre volviendo. No intenté romperlo esta vez, dejé que me encerrara. Tan indiferente que ya daba asco. Pensé en pasar aplastada los días que venían hasta que otro sacudón me dejara en algún lugar mejor. Mi propia estupidez me cansaba.
Sobretodo no pense en compadecerme a mi misma, la lástima me espanta.
sábado, 8 de marzo de 2008
El ambiente
Todo tiene su precio, así dicen, las noches en Buenos Aires tienen más pretensiones que realidades y casi todos dan más vueltas que la diversión que encuentran.
El mundo se divide en ambientes, grupos de personas que se conocen entre sí. Formados por subgrupos: mismas formas, códigos, hábitos y modas. Con mayor o menor identidad cada ámbito va formando su pertenencia, se reproduce a sí mismo. En general no hay un reconocimiento del ambiente del que se es parte pero se reconoce el adentro y el afuera.
Buenos aires genera heterogéneos, múltiples y montones de ambientes. Sus puntas se cruzan, se rozan, algunos se extinguen, otros pierden fuerzas, algunos son hereditarios, otros innovan.
El barrio, las actividades educativas, laborales, la música, las familias (sólo para muy pocos), las salidas, la moda, la forma de vestirse, el arte: determinan y dan forma a los ambientes delimitados.
Grupalidades que nacieron del colegio secundario, de la facultad, del barrio, amigos de amigos conocidos, información circulante, recitales, boliches. Parejas, rumores, chismes, conocidos, nombres, amigos, peleas, distancias, nuevos amigos.
Fuera de las determinaciones groseras de clase, la amplia y heterogénea clase media porteña genera entornos numerosos y diferentes que paradójicamente al interior de la ciudad conviven y se cruzan hasta la sorpresa. Círculos sociales que no son tan redondos. Conocidos que ofician de puente y de carta de presentación. El anonimato tampoco existe en la gran ciudad, no hay manera de escaparse, no hay forma de esconderse.
miércoles, 5 de marzo de 2008
Pequeños inconvenientes
martes, 4 de marzo de 2008
Malos sueños
Primero sueño que hay una gran pelea en la calle, que tratamos de escapar (mis amigos y yo, que ahora no recuerdo quienes eran pero eran amigos), no hay salida, no la encontramos. Estamos desesperados, a uno de los chicos (el que duerme al lado mío) lo agarran de atrás y empiezan a golpearlo en el piso, yo miro desesperada. En el momento en que su cabeza empieza a sangrar, me despierto. Lo abrazo bien fuerte, le digo que soñaba que le pegaban. Me abraza y dice que estaba quejándome dormida. Me duermo.
Ahora sueño que es la noche de año nuevo, intento ir de una fiesta a otra (otra vez con muchos amigos) pero nunca llegamos. Finalmente decido meterme al mar, aunque haga frío y el mar aparezca com un lugar peligroso. Cuando estoy dentro del agua empiezo a hundirme.
La tercera ya casi no la recuerdo, solo sé que intentaba moverme y no podía.
Me pregunto que significa todo esto. Es recurrente soñar que uno corre y no avanza o que no se puede mover. ¿Por qué? A la mañana intento buscar sentidos, usando el método levreriano, se me hacen evidentes los restos diurnos pero no logro entender porque tuve tantas pesadillas. Igualmente no fui la única que dormí mal esa noche. El ambiente no ayudaba: la gata de la vecina en celo aullaba desesperada en la ventana, la cama estaba deshecha y había tormenta.
Pero no creo que esto explique, tanto miedo en mi inconciente.
La noche siguiente me acosté asustada de soñar muertes pero increíblemente soñé toda la noche con mesas llenas de comida, con el placer de comer cosas ricas. Incomprensible mundo.
jueves, 28 de febrero de 2008
Obligada lluvia
Disfrutar de mi nuevo y lindo cuarto de día no es menor.
Encima de toda esta lista de beneficios llueve, y adoro la lluvia. Porque me gusta el gris, me gusta el “fuera-de–la-rutina” al que te conduce la lluvia, me alivia tener la justificación no culpógena para quedarme dentro.
También me gusta que hoy mi amiguita de siempre, de la vida, la elegida, se haya quedado a dormir y tomemos mate mientras le muestro lo último que escribí. A ella le parece maravilloso, siempre le parece maravilloso lo que escribo y yo nunca le creo. Y miramos fotos (las que no vió porque ya no se sienta en la compu). Y nos reímos, nos damos buen humor. Partió bajo la lluvia a una marcha, toda larga y flaquita. Me quede extrañándola.
martes, 26 de febrero de 2008
D. A.
Florida y Corrientes 13:30, un almuerzo entretrabajo que es lo aceptable en este momento de nuestra relación. Momento que es sólo un lapso porque básicamente es una larga relación: desde el flay más absoluto a los 16 años hasta una pseudo amistad con arruguitas a los casi 30.
Acepto tu invitación almorzar, va más que aceptarla la impongo. Porque me deje la billetera en mi casa y sólo tengo cinco pesos que me prestó mi compañero y con eso no pago ni mi almuerzo ni el tuyo. Así que es una invitación.
Charlamos, y siempre es raro porque no nos vemos nada y a la vez es tan fácil estar ahí sentada, comiendo y tirándome la comida sobre la ropa. En un momento de la conversación, cada uno habla de su actual situación amorosa, en ese momento somos una escena de película (y me acuerdo de Escenas de la vida conyugal que ví el domingo y que me dejo un poco alterada con la cuestión “conyugal”) e inmediatamente la ironía gana mi diálogo y la risa se impone. Entonces claro, como es inevitable entre nosotros, aparecen recuerdos: es que son muchos años, todos va. Y te acordás de cuando nos encontramos después de no vernos por muchos años, cuando vos todavía estabas casado. Me decís que estaba esplendida, al segundo te das cuenta que esa percepción es de ex novio que encuentra a su ex novia después de tiempo sin verse. Y así vamos superponiendo lo que recordamos de cuando el azar nos cruzó. Fueron varios cruces. Lo que me sorprende, no deja de hacerme reír y de darme tranquilidad es que tu relato sea tan diferente al mío. Te reís de cómo actuaste y yo, claro, alucino con el tiempo.
domingo, 24 de febrero de 2008
Contracara
ahora la de siempre
demasiada violencia para tan poca razón
demasiada yo para tan poco estímulo
sólo los interrogantes
entonces ¿qué?
el destierro
el salirse de la oportunidad
es que si no estás
lloro
me estremezco
me fracaso
y es aquel retazo de posibilidad que se me escapo aquella noche para hacerse añicos lo que vuelve
es que quizás juntos podríamos
Mi risa contagia, eso dicen, mi risa apabulla, eso muestran. Me rio con una facilidad alarmante, se escapa tan impunemente, el refugio de cualquier situación, la liviandad de crear una carcajada, justo a tiempo, y que todo se distraiga.